ESPIGADOR@S DE LA CULTURA VISUAL
28.12.2020
En este apartado se incluye una reflexión crítica acerca de las posiciones respecto a la cultura visual expuestas en el libro "Espigador@s de la cultura visual" de Fernándo Hernández

El autor ha investigado sobre la comprensión de la cultura visual y las diferentes posturas que nos podemos encontrar frente a esta, debido a la importancia que tiene en todos los contextos en los que encontramos cultura visual. Por ello su planteamiento pedagógico resulta tan importante para una enseñanza crítica de la cultura visual. De esta manera, se nos plantea la necesidad de identificar las diferentes posturas de los docentes ante una enseñanza crítica y activa de la cultura visual, y así se nos presentan cuatro posiciones que tienen los educadores al respecto
Por un lado, tenemos la perspectiva proselitista, que es aquella que tienen los educadores que ven a las manifestaciones visuales como algo negativo para los niños y adolescentes ya que, según ellos, no transmiten más que violencia, materialismo y demás comportamientos inadecuados. Esta postura parte de entender al alumno como una figura pasiva que recibe información de las imágenes que ve, pero no las analiza ni reflexiona sobre ello, lo cual me parece algo irreal si estamos hablando de niños de cierta edad o adolescentes que no hacen más que cuestionar todo lo que oyen y ven.
Después está la perspectiva de la satisfacción, sobre la cual los educadores hacen hincapié en el aspecto placentero de lo audiovisual, lo cual desemboca, al igual que la postura anterior, en tratar al alumno como un ser pasivo carente de capacidad reflexiva que solo consume imágenes por el mero placer visual.
La tercera posición, la analítica, ya ve al alumno como un ser reflexivo al que hay que educar en la cultura audiovisual porque el consumo visual es inevitable en nuestra sociedad.
Para terminar, tenemos la autorreflexiva, la cual parece aunar todas las posiciones anteriores de una manera constructiva.
En mi opinión, es cierto que dentro de las imágenes, videos y toda la cultura visual que nos rodea contiene en ocasiones mensajes negativos que pueden ser nocivos para el desarrollo de los más pequeños, sin embargo, una vez que un niño adquiere en su desarrollo psicológico la capacidad de reflexión, la cual aparece durante la etapa de Educación Primaria, es imposible eliminar de su día a día lo visual porque es algo inevitable. Pero eso no quita el contenido nocivo de algunos mensajes. Por ello, hay que tener en cuenta la capacidad comprensiva de los chicos y chicas que están aprendiendo sobre el mundo que les rodea y guiarles para que consigan tener una visión crítica de todo lo que consumen.
Creo que el error principal parte de no aceptar que los alumnos tienen su palabra y piensan y analizan lo que ven. Echemos la vista un poco atrás y recordemos lo que pensábamos nosotros cuando éramos más pequeños y veremos que éramos mentes pensantes y que en realidad teníamos más capacidad reflexiva de la que los mayores creían.
Estamos viviendo en una sociedad que es muy visual, y más aún ahora con el avance y desarrollo de las nuevas tecnologías, por lo que creo que es muy importante hacer a los niñ@s pensar y reflexionar sobre lo que ven, lo que querrían ver y lo que no, teniendo en cuenta las diferentes interpretaciones que puede tener una imagen según cada persona, y la intención que puede tener el autor con esa expresión visual.
Incluso, además de promover una guía para la comprensión crítica de la cultura visual, los maestros y futuros maestros podemos crear debate en el aula y también servirnos de toda esta avalancha de recursos visuales y abrir la actuación educativa a otras posibilidades para que disfruten mientras aprenden, e incluso puedan crear y formar parte de la cultura visual explorando su interior y utilizar el placer visual para aprender, no solo a captar mensajes, sino a expresarse.